6 de noviembre de 2012

Folie à plusieurs

"Volverán las oscuras golondrinas
en tu balcón sus nidos a colgar,
y, otra vez, con el ala a sus cristales
jugando llamarán;
pero aquellas que el vuelo refrenaban,
tu hermosura y mi dicha al contemplar
aquellas que aprendieron nuestros nombres...
esas... ¡No volverán!"
Gustavo Adolfo Bécquer

El día está soleado, pero me parece que está lloviendo.. No, en realidad está muy soleado; las hojas de los árboles y las plantas brillan en las distintas tonalidades del verde infinito, y el cielo está azul, profundamente azul y tan resplandeciente que sientes que tu mirada nada en él; y las nubes blancas llenas de luz y perfectamente definidas, la brisa fluye aunque hay un ligero calor que se soporta incluso teniendo un sweater..

Todo brilla intensamente, pero (y siempre hay un pero) mis ojos no brillan lo suficiente, algo aparte de la sangre y oxígeno fluye por mis venas, es como si mi torrente sanguíneo hubiera sido modificado por mi estado de ánimo. Sin embargo, me permiten ver el día tan maravilloso, claro que yo no me siento tan maravillosa... Siento un vacío, como el espacio infinito que se sigue expandiendo a cada minuto y nadie ha podido explorarlo.

Da nostalgia recordar aquellas sonrisas, y en algún punto de la historia sentí que el tiempo transcurría tan lentamente que llegué a pensar que 30 minutos eran 3 horas, pero no era así... Tanto acertó Einstein en eso de la relatividad del tiempo... Tanto pienso y tanto hablan las cosas del pasado en este día soleado y hermoso: la gente que pasa, sus gestos y colores, sus franelas con el rostro de Dalí, o con un estampado de The Beatles, los bebederos y el verde infinito de las hojas. Todo parece llevar por nombre los recuerdos.

El día está realmente hermoso, que lástima que no pueda disfrutarlo como se debe, y aún no sé qué será de los días como estos, en los que no pasaremos juntos, y ni cómo convivir con el vacío y soportar la lucha entre intentar despejar mi mente y ver cada cosa y detalle que reviven el pasado. 

5 de noviembre de 2012

5:50 pm

Convulsionan la nostalgia y la soledad, y se mezcla la sonrisa con la tristeza y el suspiro. ¿Cuál es el resultado? Versos.

A veces
A veces, aunque pareciera que siempre
A veces, casi siempre me siento sola
Soledad, mi íntima amiga
Conoce mi pesar
Soledad y la tristeza.
Salgo,
Camino,
Sonrío.
Luego vuelvo y decaigo a 200 km/h al vacío
Allí me siento y escribo
Y en ese preciso instante
(Justo ahora cuando mi lápiz escribe esta palabra
Y este paréntesis)
Me encuentro esperando su mensaje
¡Déjame respirar!
Me atasco y desespero
Y me siento más sola a cada minuto,
Tu mensaje, luego existo.

Quiero hablarte,
Decirte que me quedo tendida pensándote
Y que te quiero
¡Te quiero!
En qué momento el tiempo nos dispersó,
Nos modificó
Y ese nos es porque modificó el “nosotros”
Nuestro nosotros.
Todo viene,
Todo va, y de vez en cuando
Todo vuele,
Pero
¿Qué sentir?
¿Qué hacer y
Cómo actuar?

Te necesito
Como nosotros de la respiración,
Y la respiración de los pulmones
Y los pulmones, a su vez, del aire
Con oxígeno, claro está.

Cómo pasan los minutos, elásticos
Como si un segundo no se quisiera separar del otro,
Elástico
Como quisiera estar justo ahora contigo,
Sin querer separarme,
Como un bebé de su madre..
Y sigo esperando su mensaje, y me miento.
No quiero que me hables del clima ni de la clase,
Quiero que hablemos de nosotros,
Del “te quiero”
 Pero Cronos me va ganando,
Y no tengo la habilidad de caer como un gato,
Y el sol se va alejando,
Y la luna me conmueve,
El papel se va acabando
Y el oxígeno sigue entrando en mi organismo
Pero
A qué sabe,
A qué huele
Dónde estás y dónde estoy,
Y qué haces que no respondes..

Y parafraseándo a Neruda.. "Yo me voy. Estoy triste, pero siempre estoy triste. Vengo de tus brazos. No sé hacia dónde voy".