31 de agosto de 2013

Conclusión # -1: Querer no es poder


Es un huracán. Con una fuerza magistral arrastró todo, se llevó por delante miedos, sueños, sentimientos.

Se convierte en impotencia el creer que te pude tener, vencer al tiempo.. Recuerdo que soñamos juntos, conjugamos tantas veces los verbos en futuro.

No me alegro de cómo está todo en ruinas, y a pesar que existen admiradores de la historia y de las ruinas griegas, no creo que ningún turista se atreva a fotografiar todo esto como quedó. Sé que fuiste real y quizás por eso te sigo extrañando en el café del desayuno, en las películas y en las obras de artistas.

Te extraño cuando el sol me advierte que está para playa o cuando la luna viene llena, o en la llamada inexistente de las 10.

Olvidé tantas cosas a tu lado y aprendí un montón más. Trataba por todos los medios que el tiempo se alargara para estar a tu lado lo máximo que se podía porque no me quería separar.

¿De que te quiero?: Un millón y más.

Y lo sé, eres golondrina y estrella fugaz, y pasas tan veloz que mientras te veía y pensaba que te tenía, pedí mil deseos y que te quedaras permanente. Deseos de convertirme en estrella para viajar contigo a millones de años luz y compartir contigo la eternidad. Deseos que no mueren ni por las amenazas de la ley de gravedad. 

El círculo vicioso de los amantes frustrados

Es bien obvio. Cuando quieres a alguien, no ves la forma de estar con otra persona que no sea esa, por lo que ignoras a quien quiere tenerte, quererte y estar nada más contigo.

La persona con la que quieres estar, a su vez está cegada por alguien más, con la que quiere estar y querer y no ve forma de estar con otra persona por lo que ignora a quien quiere estar con él/ella, en ese caso a ti... O más personal, a mi.

Entonces, qué fin tiene una cadena de tontos frustrados queriendo querer  al que no se deja querer por querer que lo quiera alguien más. Y así estamos todos, enrollados, ignorados, deseando amor.

Si se ve desde esta perspectiva, ya veo que si es suerte cuando dos personas están juntas y se quieren... Ya lo entiendo.


Esto me hace pensar que por qué debo estar así, por qué simplemente no me quiere a mi y basta de infinitos ciclos. Es triste querer de esta manera, pienso que deberíamos descomplicarnos y que nos atrevamos. Pero luego pienso en él, que le pasa lo mismo que a mi, deseando tanto como yo a él a esa chica, amándola de lejos y cuestionándose por qué no estar juntos y por qué no lo quiere.


El problema básico es no querer estar con más nadie sino con esa persona.. Entonces lo entiendo a él y me pongo en sus zapatos y en su corazón triste, y así lo comprendo ¿Cómo juzgarlo? ¿Cómo obligarlo? 

3 de agosto de 2013

Trip

No era ninguna novedad que ya no estaba. Me había acostumbrado en viajar en el tren de la memoria.. Me había memorizado todas las rutas, las calles, los paisajes.

Aún sabiendo que los tiempos que pasan no regresan, repasaba a cada rato el pasado. Lo repasé miles de veces intentando hallar una pista, un hallazgo del porqué se marchó. Se podría decir que me convertí en una empedernida de las ciencias del pasado, de la historia y la física. Buscaba a toda costa un pequeño detalle, una excusa en realidad.


Luego de haber repasado centenares de veces el pasado, andar en tren día y noche y andar en vigilia en una sucesión indefinida de recuerdos, llegué a la conclusión de que no existe ninguna pista, sólo existe un hecho, el hecho que lo determinó todo: No le importaba.